Copyright (c) 123RF Stock Photos http://www.123rf.comLa escuela es un espacio complejo que necesita de nuevas respuestas. En este contexto, el liderazgo TIC puede jugar un papel importante como ayuda a la innovación, la mejora y el cambio. Sin embargo, las estructuras rígidas y la resistencia al cambio de los centros dificultan la labor de liderazgo de la coordinación TIC. ¿Qué vías tenemos para contribuir a que el proyecto educativo con TIC lidere la innovación?
Cuando hablamos de liderazgo educativo, nos podemos estar refiriendo a diferentes estilos de liderazgo que varían, en función del contexto y el grado de experiencia de cada centro. La persona que coordina las TIC en el centro debe liderar el proyecto educativo, buscando un liderazgo transformador que implique y motive a toda la comunidad, propiciando la innovación y la mejora en un proyecto compartido. Podemos definir de forma sencilla el liderazgo, como saber a dónde vamos, tener claros los objetivos y unirnos para lograrlos, sin prisas pero trabajando en una dirección clara.
Este liderazgo necesita unas características como la creatividad y la capacidad para generar entusiasmo y confianza, favorecer ambiente agradable de trabajo y contribuir a la formación del profesorado. La coordinación TIC será facilitadora, estando siempre presente para conducir y ayudar al resto, pero cediendo y delegando en los demás. Esto requiere de formación y experiencia específicas. Sin embargo, lo importante es creer en uno mismo, en nuestra personalidad, sin pretender fingir nada nuevo, sino apasionarnos con lo que hacemos. En cualquier caso, es importante tener presente, que el liderazgo no es un objetivo, sino un medio y una ayuda para lograr la transformación. ¿Este liderazgo solo puede ser individual?
La experiencia nos dice que los ambientes de trabajo ligados a la cooperaCC en wikimediación y el trabajo en equipo, permiten afrontar la innovación con más expectativas de éxito. Actualmente, los cambios y revoluciones están más ligados a grupos que a personas concretas. A través de una mayor capacidad colectiva de reflexión, es posible lograr un mayor apoyo para el cambio. Así pues, se necesita un nuevo estilo colaborativo, participativo, democrático, comprometido e implicado con el centro. Como respuesta a la complejidad de la escuela actual, proponemos por tanto, un liderazgo transformador compartido, no un liderazgo personal. ¿Cómo podemos lograrlo?
Será necesario crear comunidad, con un interés común que se fije objetivos ambiciosos pero establecidos a partir de objetivos simples, realizables y concretos. La flexibilidad, la participación de todos y la adaptación a las necesidades de los miembros serán fundamentales para reforzar la comunidad. Una idea importante es que la comunidad deberá hacerse a sí misma, es decir, es necesario conocer e intercambiar experiencias de éxito de otros centros, pero cada comunidad debe buscar su propio camino. En este sentido, lasredes en Internet son una magnífica oportunidad para abrir aulas y centro, rompiendo estructuras y barreras.
Al hablar de liderazgo transformador del centro, hemos indicado que la mejor vía es la comunidad, pero debemos tener claro que no es posible crear esa comunidad transformadora si no se incluye a todos los agentes, siendo el alumnado y las familias una pieza clave. No es posible una transformación real si las familias no participan.
Sin embargo, hay que ser realistas, y en los centros hay múltiples factores dificultan este liderazgo TIC compartido y transformador. Nos referimos a las resistencias al cambio, el aislamiento de la coordinación, la necesidad de formación del profesorado, la falta de apoyo, recursos y tiempo, los problemas técnicos, etc.
¿Qué opinas de estos temas? Piensa en el contexto de tu centro, ¿crees que es posible ejercer el liderazgo TIC?, ¿qué dificultades se te presentan?, ¿qué ayudas y fortalezas tienes?, ¿qué podemos hacer para superar esas dificultades?, ¿cómo es tu experiencia de liderazgo del proyecto educativo con TIC?